Carta Abierta A Mi Gente

Queda un poco mas de una semana para que, finalmente, me traslade a mi próxima aventura, por allá lejos...
Pensar que me vine a Stgo a terminar mis estudios, y me fui quedando, quedando, quedando...hasta ahora, que emprendo el vuelo de nuevo...

En estos días de ordenar tantas cosas, deshacerme de algunas, y conservar otras, han vuelto recuerdos de esos primeros años, en los que estudiaba, llevaba mi depa y trabajaba...cuando me amanecía haciendo planos y me iba a trabajar sin dormir, a punta de café y cigarros, cuando tenía que armar álbumes fotográficos...cuando tenía que hacer prácticos en la calle a primera hora de la mañana en pleno invierno, más las eternas noches de estudio...qué rico fue cuando recibí mi título...Aunque era bastante solitaria mi vida, no quería socializar mucho, porque no sabía abrir mi corazón...hasta que llegó David, el gordo, mi compañero por 5 años...pensar que en 3 días ya habíamos empezado a pololear jajajajajajaja...fue uno de los regalos de navidad más lindos que he tenido...

Y así pasaron los años, puro trabajo, casa, y amor, consolidando una buena situación económica, hasta que llegaron las vacas flacas...en fin...hasta el terremoto lo pase acá en el piso 17, uuuuuuufff!!!

Con esto de mi traslado, me he ido dando cuenta del afecto que he recibido acá de muchas personas...es raro, pero no me había percatado de cuanto cariño había generado en mi alrededor, siendo pesada como soy, y con lo que me cuesta expresar lo que siento...Pero no me puedo ir sin destinarle unas palabras a algunas personas...

Mis Primos y Tios: son tantos, que lo resumiré, son parte de mi sangre, gracias por hacer mi llegada a Santiago más llevadera, por todos esos carretes, conversaciones y compartidas de cigarros que tuvimos...los quiero muchisimo Paty, Robert, Jorge, Pamela, Javiera, Camila, Mali, Mariana, Rodrigo, Cristian, Felipe, Karen, Pato, Mario, Gloria, Angelica, Pedro, Victor, Tia Clara, Tia Paty, Tio Roberto.

A mis hermanas Claudia, Marisol, Pamela, mis sobrinos, y mis sobrinos nietos Sofita y Pipe; el Manu, Carmen, Marjorie y Thiare...gracias por los momentos compartidos...

Mi Evita, Rolo, Romina, Tia Gina...ustedes siempre me hicieron sentir como en casa...el cariño que les tengo es increíblemente grande...se pasaron por todo...Eve, tú sabes que eres mi confidente y que siempre estaremos juntas pase lo que pase...eres como una hermana para mi...

Barbi, Paolo, Carito...siempre totales, los quiero mucho...

Pato, Tiku, Yayo, Morenazo, Isa, Maca, Rorro, Francis (incecta), Ann, Gata, Jan...gracias por todo en este tiempo, han sido un 10, lo he pasado increíble y tengo lindos recuerdos con ustedes, en carretes, en skype, en conversas de lo humano y lo divino...los quiero mucho, son unas excelentes personas...

Mi Padrino-Tío Pato, creo que lo mejor de estos años fue haberte recuperado, después de muchos años de problemas...el tiempo perdido no lo podremos recuperar, sólo espero que de aquí en adelante seguir contando contigo y que nada nos vuelva a separar...eres la raja, te adoro!!! (me emocioné)

David...fuiste el hombre que me acompañó 5 de los 6 años de mi vida aquí...has sido el más grande amor que he tenido en mi vida, y gran parte de lo que soy hoy, fue de tu mano...me cuidaste todo lo que pudiste, estuviste siempre conmigo cuando lo necesité, y a tu manera, que sólo yo entiendo, fuiste un gran hombre...la que te lleve se llevará un gran premio, y ojalá que te cuide...Me alegro de irme en paz contigo, y que hayamos podido superar las diferencias como adultos...

Y tu, que apareciste justo cuando menos te esperaba...solo diré que me gustas mucho, pero que eso pasará...

Disculpen los que se me quedaron en el tintero, a todos ellos, les agradezco todo también, y saben que hay afecto de mí hacia ustedes.

No me echen tanto de menos, por que estaré viniendo seguido a Stgo...la distancia será física, porque a cada uno de ustedes los llevaré en mi corazón...se ganaron con justicia un pedacito de él y allí se quedarán...y ahora existe facebook, twitter, whatsapp, Bb messenger, y todas esas cosas...antes apenas las puras cartas...

Me llevo hermosos recuerdos....siempre fueron más los lindos momentos, y de momentos bellos tuve muchos en este tiempo acá...

Los quiero mucho, y gracias por todo en estos años, por soportar a esta loca que soy yo, y por haberme permitido conocerles y darme su amistad....gracias, totales!!!!

Cuentos Para Santiago en 100 Palabras

Mis cuentos para Santiago en 100 Palabras

El Bar

Todos los días, a las 19.00 horas, llegaba al bar. Entraba, y saludaba cariñosamente de beso y mano a mi grupo, reunidos como siempre en la misma mesa. En la barra pedía su botella de vino tinto y bebía pensativo. Un día le preguntamos qué le pasaba y nos dijo que perdió a sus hijos y que por eso venía al bar, porque se los recordábamos felices y parlanchines, reunidos ante una cerveza. Terminó el vino, se despidió de todos y se fue. Volvió al día siguiente, y lo esperábamos con una botella de vino tinto para brindar con él.

Trayecto en Sueño

Llegué al Metro Elisa Correa. El estaba a mi lado en el andén. No supe su nombre, sólo nos miramos y subimos al tren. Combinamos en Vicente Valdés; él me cuidó de la marea humana en plena hora punta. En el trayecto al centro el sueño lo venció, puso su cabeza en mi hombro y se quedó dormido. Lo miré, apoyé mi cabeza junto a la suya y me dormí. Despertamos en Plaza de Armas, salimos de la estación y nos despedimos con una mirada. Desde ese día no lo he vuelto a ver.

Vacaciones

Corría apresurada por las mangas que había dispuesto el aeropuerto para los viajeros tras los daños que dejó el terremoto. Llegué justo a la hora de embarque a dejar mi maleta. Me miraron con desaprobación en el counter, pedí disculpas por el retraso y corrí a embarcarme. Empezaban mis vacaciones, el avión despegaba y yo quería llegar luego a mi destino; iba volando al sur, a mi Osorno, a abrazar a mis padres, abuelos, tíos y primos, a los que la noche en que Chile se sacudió cuando yo vivía en un piso 17, pensé que no volvería a ver.

La Primera Noche

Ella contuvo un estremecimiento. El, la siguió acariciando hasta que ella se rindió a todas las sensaciones que le producían y se dejó llevar; él la guió, envolviéndola en sus brazos y soltándola poco a poco hasta que ambos se dejaron caer en ese dulce abismo. Así los sorprendió la mañana, un nudo de brazos y piernas. El se levantó y preparó café para los dos. Ella, aún sin poder creerlo, bebió su café en silencio. Salieron juntos a la calle, ella tomó su vehículo y se fue rauda. Pero a la semana siguiente volvió. Y él la estaba esperando.